Primer salto evolutivo en la carrera de KC, con la Nebulosa Trífida en Sagitario en la portada y tras los 3 primeros discos en la misma simetría, Robert Fripp y cía. se inspiraron en las Baleares para crear esta joya totalmente diferente a sus predecesoras. Album sublime, experimental, componiendo desde la improvisación obra maestra que cuando tocaban en directo casi no se reconocía, no es sólo música, es un experimento que transmite imágenes y lugares en sus temas...
'Formentera Lady', ' Sailor's Tale', 'Girls on the road' o piezas para cuerda casi (o puramente) barrocas como 'Song of the gulls' y el insuperable tema que le da título que es un 'chill out progresivo' que a pesar de durar más de 9 minutos siempre me parece corto, la coda es un himno (como en Hey Jude de Beatles). Islands es la música hecha imagen, transmite olor a sal, sonido de olas, te deslumbra el sol y pisas la arena de la playa cuando la oyes...
Cuando tengo la suerte de estar en Formentera no hay nada mejor que estar en alguna de sus playas escuchando Islands, es flipante, hay que vivirlo. Te enganchas el mp3 con Formentera Lady, Sailors Tale o Islands, te tumbas y es un sueño, o vas por los caminos de tierra entre sabinas, higueras, bosque bajo o por las salinas y se vive el espíritu de Islands. Hay que tener en cuenta que la calma que contagia el disco viene inspirada también por el momento en que se hizo, 1971, cuando Formentera era una isla prácticamente desierta y aislada que junto con Ibiza formaban el reducto hippie de Europa, donde trotamundos y exiliados de la sociedad de consumo se asentaron a cultivar esa quietud que proyecta el disco.
'Formentera Lady', ' Sailor's Tale', 'Girls on the road' o piezas para cuerda casi (o puramente) barrocas como 'Song of the gulls' y el insuperable tema que le da título que es un 'chill out progresivo' que a pesar de durar más de 9 minutos siempre me parece corto, la coda es un himno (como en Hey Jude de Beatles). Islands es la música hecha imagen, transmite olor a sal, sonido de olas, te deslumbra el sol y pisas la arena de la playa cuando la oyes...
Cuando tengo la suerte de estar en Formentera no hay nada mejor que estar en alguna de sus playas escuchando Islands, es flipante, hay que vivirlo. Te enganchas el mp3 con Formentera Lady, Sailors Tale o Islands, te tumbas y es un sueño, o vas por los caminos de tierra entre sabinas, higueras, bosque bajo o por las salinas y se vive el espíritu de Islands. Hay que tener en cuenta que la calma que contagia el disco viene inspirada también por el momento en que se hizo, 1971, cuando Formentera era una isla prácticamente desierta y aislada que junto con Ibiza formaban el reducto hippie de Europa, donde trotamundos y exiliados de la sociedad de consumo se asentaron a cultivar esa quietud que proyecta el disco.
Gustos aparte, es una joya, una obra de arte única, me reafirmo en lo que
llevo escribiendo desde hace años:
"Es la música hecha imagen, transmite olor a sal, sonido de olas, te
deslumbra el sol y pisas la arena de la playa cuando la oyes."
Absolutamente imprescindible.
PS: En algunas calas de Ibiza también funciona...
PERSONAL (LINE-UP): * ROBERT FRIPP – Guitarra, melotrón * Peter Sinfield - Letras y diseño gráfico * Boz Burrell – Bajo y voz * Mel Collins – Saxofón,flauta * Ian Wallace – Batería * paulina Lucas – Soprano * Keith Tippett – Piano * Robin Miller – Oboe* Marc Charig – Corneta * Harry Miller – Contrabajo
Pulsa play para escuchar ISLANDS: youtube
No he estado nunca en Formentera o Ibiza, pero si tengo la suerte de volver alguna vez a Menorca ya sé qué música me voy a llevar a la playa.
ResponderEliminarMucha suerte con el blog, Mike.
Tenía creo 12 añitos cuando compré este disco..ufff muy chocante,la música de esos temas.. nada convencionales. Pero tenían algo que enganchaban, En Formentera Lady el contrabajo que repite las notas, simulando el vaivén de las olas y la soprano imitando, según mitología, el sonido de las sirenas...Una tranquilidad y sosiego que me llevaron a interesarme desde pequeño por Formentera, qué tenía esa isla que pudo inspirar esa música... y efectivamente se convirtió en mi paraíso personal y este disco uno de los más grandes del rock sifónico/progresivo...
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